Reclama tu RIQUEZA de POSIBILIDADES
Escuchas la palabra RIQUEZA ¿y en qué piensas?
Dinero, opulencia, lujo, por ejemplo. ¿Qué más?
Solemos pensar en tener esto o aquello, ir hacia aquí o hacia allá… una familia, una casa, trabajo, algún viaje… Pensamos en riqueza y nuestra mente se va a una mansión, a playas del caribe, vacaciones en Suecia, hoteles lujosos.
Digamos que es eso y mucho más que eso: Lo incluye absolutamente todo. Más bien la riqueza de posibilidades es acerca de cómo quieres que sea tu vida. ¿Te has hecho esa pregunta alguna vez?
Hagamos juntos un ejercicio. Quiero invitarte a cerrar tus ojos y recrear la situación que describo a continuación: Imagina que alquilas una habitación de hotel o un departamento para tus vacaciones. Al ingresar te encuentras con muebles de plástico, un televisor de los noventa, cortinas estilo de los 80 (con volados) y el cubrecama haciendo juego.
Ahora borra esa imagen y recrea la siguiente. Llegas al hotel y te reciben llamándote por tu nombre, te acompañan a tu cuarto y te encuentras con una recepción de champagne y chocolates. La luz ingresa por un gran ventanal, los muebles son antiguos, las sábanas de tu cama de muy buena calidad, hay un televisor de última generación, una máquina de café a tu disposición…
¿Qué es lo que cambia entre una imagen y otra? ¿Puedes reconocer cómo percibes la energía disponible en un lugar y en otro? ¿Puedes darte cuenta de lo que crea una energía y otra?
La sensación es muy diferente, verdad. ¿A qué invita una energía? ¿A qué invita la otra?
¿Desde cuál de estas energías te gustaría crear tu vida?
La riqueza de posibilidades tiene que ver con las energías desde las que estás invitando para crear tu vida; es acerca de estar dispuesta/o a incorporar nuevas posibilidades.
¿Cómo te gustaría que sea tu vida a tus 40, a tus 50, a tus 60… a tus 100 años?